Son las 6 de la mañana y suena el despertador,te despiertas deseando poder dormir 12 horas más,pero no puede ser y te levantas.Llegas al lavabo a oscuras y medio dormido pero como te conoces el camino de memoria llegas sin problemas.Mientras estás a punto de dormirte en la taza del water empiezas a repasar como va a ser el dia o como crees que va a ser, mejor dicho.Te metes en la bañera y esa ducha acaba de despertarte.Te vistes mirando el reloj que aunque no me espere nadie en el trabajo,tengo muy metido eso de no llegar tarde,herencia de mi madre.Coges una bolsa de plástico y metes el yogur y el bocadillo y antes de salir por la puerta maldiciendo esta vida tan monótona,te vuelves y entras en sus habitaciones y los ves a los tres durmiendo,Daniel estirado en la cama y piensas que grande está ya y Ángel en su cuna retorcido y piensas que bueno que parece así dormidito y a Susana agotada porqué seguramente se habrá levantado un montón de veces por la noche y no habrá dormido bien.Y entonces te das cuenta que merece la pena el madrugar,merece la pena aguantar la mala educación de algunos,la estupidez de otros,merece la pena porque lo haces por ellos,por tu familia.Merece la pena luchar por sacar adelante un negocio,con lo dificil que es eso hoy en dia,para poder darles un futuro,para que se sientan orgullosos de que sus padres lucharon por tener una vida mejor y no se conformaron con una mierda de sueldo toda la vida.Merece la pena quedarte sin vacaciones y quitarte muchos caprichos,porque si no luchas por ellos,¿por quien o que lo vas a hacer?.
En definitiva...merece la pena.
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